"PERDÓN BILARDO GRACIAS". La bandera que se convirtió en un grito de guerra en el Mundial 1986 y que tiene un significado histórico reapareció ayer en el homenaje que Estudiantes le rindió a Carlos Bilardo a 40 años de la obtención del Torneo Metropolitano 1982.

El paradero de la bandera que apareció detrás de uno de los arcos en el estadio Azteca se desconocía por completo. En 2016, Clarín pudo dar con José Luis Scaccheri, un bilardista de pura cepa que decidió hacer la bandera en reconocimiento al Doctor.

A sus 91 años, contó la gesta que significó colgar el trapo en el Azteca con lujo y detalle: “Cuando iba caminando para entrar, me frena un militar. Me dijo 'señor, pare. ¿Qué lleva ahí adentro?''Una bandera', le dije. Y me pidió que abra la bolsa. Ahí la saqué y la abrí. Sé que de ese momento hay una foto. Después me enteré que había una custodia impresionante porque temían que ataquen al presidente de México”

Increíblemente, Scaccheri no tiene ningún registro de la bandera y nunca supo a dónde fue a parar: “El partido se terminó y el dueño me dijo 'saltá a la cancha y llevale la bandera a los jugadores'. Yo tenía 60 años, y estaba la fosa. Era imposible saltar a la cancha para mí. Miraba cómo desde la tribuna lateral los hinchas argentinos se tiraban de cabeza. Y la sacaron". 

Consumada la consagración de Argentina en México, descolgaron la bandera y la pasearon por todo el Azteca. 

"La bandera la tiene Bilardo. En algo intervino. Se metió adentro del vestuario. La debe tener él o alguno de los jugadores”, sospechaba hace unos años Scaccheri. 

Lo cierto es que la bandera apareció ayer en el estadio Uno, en el homenaje que el pueblo Pincharrata le rindió al doctor, en un día cargado de emoción.