FABIÁN DOMAN anunció su renuncia como presidente de Independiente, en medio de un clima caliente que no para re crecer en pleno presente de incertidumbre.

La crisis en Independiente no parece tener un epílogo. Con el equipo ubicado antepenúltimo en la Liga Profesional, con un acumulado de nueve partidos sin ganar, también prevalecen las deudas millonarias por saldar, la inhabilitación para reforzarse y la ausencia de un entrenador oficial, una sumatoria que se profundiza con la bomba de la renuncia de Doman.

“Tengo la conciencia limpia. Como las manos. He dejado mi trabajo por Independiente. Y lo volvería a hacer”, expresó el conductor en su comunicado a través de las redes sociales.

El ciclo de Doman al frente del club de Avellaneda, a cuya presidencia había llegado luego de los ocho años de Hugo Moyano, se extendió apenas durante 186 días: había asumido el 7 de octubre pasado.

“El club vive tiempos difíciles. Los peores de su historia. La crisis económica, deportiva y judicial del club no tiene antecedentes. Ya sabemos de dónde viene. Su profundidad es tan grande que no alcanza para con un solo espacio político o un grupo de voluntades. En estos seis meses de gestión hemos logrado muchos aciertos, pero también cometido errores, en el plano económico y en lo deportivo”, amplió.

Ahora el puesto que queda inmediatamente detrás del que ocupaba Doman es el del vicepresidente 1°, que hoy está ocupado por Néstor Grindetti, el intendente de Lanús, quien tendrá que asumir en su lugar. Debajo suyo aparece el periodista Juan Marconi, el vice 2º.

El comunicado completo