AUGUSTO BATALLA dejó una huella grande en San Lorenzo pero no pudo continuar en Boedo tras la finalización del préstamo que había acordado con River.
Hoy ataja en Granada con el casi imposibe objetivo de matenerlo en la máxima categoría del fútbol español, pero no se olvida de su paso por el Ciclón, tras haber forjado una gran relación con Ruben Darío Insua, quien ayer dejó el club por los malos resultados.
"Sos y fuiste de las personas más importantes en mi vida, y siempre voy a estar agradecido, y a tu lado. Gracias por todo", concluyó el guardameta, que en julio deberá volver a River para resolver su futuro, ya que a fin de año quedará libre y con el pase en su poder.