La última esperanza argentina de medalla era en lanzamiento de jabalina, de la mano de Braian Toledo. El atleta, de 22 años y de futuro enorme, cumplió una gran labor y finalizó en el puesto 10. Una actuación heroica de cara a Tokio 2020, su gran meta y a la que llegará con 26 años, la edad de la explosión en la disciplina.
El mejor registro de Toledo fue 79,81 metros, lo que le alcanzó para mejor veinte puestos lo que había conseguido en Londres 2012, a donde compitió con sólo 18 años.
De cara al futuro, un gran cierre para el atleta argentino.