El primer inmortal.
El “Chueco”, como lo conocían desde pibe, ya había recorrido un largo camino. Las rutas de tierra de la Argentina le quedaban “lentas”, los desafíos que el necesitaba estaban afuera del país. Hizo sus primeros palotes en 1949; el 3 de abril de ese año logró su primera victoria en el circuito de Ospedaletti en San Remo (Italia), a bordo de una Maserati 4CLT del equipo del Automóvil Club Argentino.
Más allá de debutar en la primera carrera de Fórmula 1 en 1950 (subcampeón detrás de Farina), obtuvo su primer campeonato con Alfa Romeo en el ‘51.
Al año siguiente en Monza tuvo un grave accidente que lo alejó dos temporadas de la competencia.
En su vuelta a los circuitos, Fangio no paró de ganar. De manera consecutiva se quedó con los campeonatos del año 1954 (Mercedes/Maserati) 1955 (Mercedes) 1956 (Lancia/Ferrari) 1957 (Maserati).
Fangio se retiraría 11 meses después de su último título, en 1958. Allí comenzaría el mito a romper.
Fangio siguió ligado como hombre de consulta, el “oráculo” vivo de la Fórmula 1. Michael Schumacher era un pibe de 20 años, y en un evento de Mercedes en el año 1992 conoce al “Chueco”. El alemán ya corría en la máxima categoría, y había pilotado para la marca teutona en Le Mans.
Tiempo después, al igual que Don Juan Manuel, el alemán llegó a su quinto campeonato y la pregunta se imponía: ¿Quién era mejor? Schumacher no dejó dudas:
Schumacher superaría a Fangio con la conquista de 7 títulos del mundo, pero no se sentiría mejor.
Corría el año 2017, el británico Lewis Hamilton estaba ansioso, porque había empatado la línea de Prost y Vettel con cuatro títulos, quedando a un paso del gran mojón: Fangio.
En el 2018, más allá de llegar a 5 campeonatos, hizo historia con Mercedes, la marca más representativa del héroe de la Fórmula 1: “Es increíble pensar que voy hacia el mismo número de títulos que él", manifestó el británico y agregó: "Fangio es el padrino de todos los pilotos. Es uno de los grandes desde el comienzo de este deporte y siempre será admirado".
Al superar al “penta”, una comitiva balcarceña conformada por el presidente de la Fundación “Juan Manuel Fangio” Antonio Mandiola y Juan Manuel Fangio II se encargaron de intercambiar algunos presentes con Lewis Hamilton. El piloto inglés les regaló el casco con el que llegó a los 5 títulos, que hoy se exhibe en el museo de Balcarce. A su vez, Juan Manuel Fangio II le entregó una réplica de la copa que la FIA le dio al “Chueco” como campeón del mundo. Hamilton se sorprendió por lo pequeño del trofeo y bromeó con el sobrino del campeón: "¡Te ves muy parecido a tu tío!". El inglés llegó al sexto y ahora busca la corona que ostenta Schumacher.
El legado de Fangio sigue vivo, en cada curva, chicana o “sorpasso”, el “Chueco” está ahí. Fue el primero de los grandes campeones, el que fijó un estándar. Aquel que sobrevivió a su generación, vio a muchos de sus compañeros dejar la vida en la pista. El hizo la suya.
Diseño y edición de fotografía
Matias Di Julio