El 7 de septiembre de 1945 se izó la bandera argentina como parte de la ceremonia inaugural del estadio que el Club Atlético Huracán levantó después de casi seis años de construcciones. El local, ese día, se enfrentó a Boca por la fecha 20 del torneo de Primera División.

Huracán llenó su nuevo estadio recibiendo a casi 80 mil personas para ver el partido que fue dirigido por el árbitro V. Rey y que terminaron ganando los locales por 4 a 3 en un partido de trámite cambiante y que sólo a los 39 minutos del segundo tiempo encontraría su resultado definitivo. 

Huracán ese día histórico formó con: Quiroga; Pascal y Alberti; Naya, Giménez y Cerioni; Unzué, Méndez, Salvini, Simes y Ferreyro. Boca Juniors se presentó con: Diano; Marante y Dezorzi; Bendazzi, Espinosa y Pescia; Boyé, Corcuera, Sarlanga, Ricagni y Pin. 

El primer gol en el nuevo estadio fue marcado por Ferreyro a los 14 minutos del primer tiempo después que "el jóven puntero izquierdo aprovechó un corto rechazo de Pescia para tirar rápido a un rincón", según dice la crónica del recordado Félix Frascara. 

El Gráfico estuvo presente no solo en el momento de la inauguración a través de la crónica que les compartimos si no también en el proceso de su construcción. Si bien al estadio se lo conoce como La Quema, El Palacio, su nombre verdadero desde el 27 de septiembre de 1967 es Tomás Adolfo Ducó, en recuerdo del presidente del club que comenzó su construcción y que tuvo dos períodos como presidente, 1938 a 1945 y de 1952 a 1954, además de un breve período en 1949. 

Escenario no solo de partidos inolvidables, si no también de grandes acontecimientos de la cultura popular (como las presentaciones de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota en 1993), el Palacio Ducó sigue más vivo que nunca.