JULIA RIERA es la segunda argentina del ranking WTA y una de las jóvenes con mejor presente del tenis nacional.

La nacida en Pergamino, quien comenzó la temporada como 261° y actualmente es 143°, ostenta muy buenos resultados en esta temporada, en la que obtuvo títulos W25 a nivel ITF y alcanzó su primera semifinal a nivel WTA.

"La mayor diferencia entre ambos circuitos es la intensidad y lo mental. En ITF las jugadoras van abajo y tal vez sueltan los partidos, pero en WTA buscan la manera de ganarte como sea", señaló.

Sobre el salto de calidad que dio en el WTA 250 de Rabat con triunfos ante jugadoras top 100, Riera, de 21 años, contó lo que sintió en el partido ante la egipcia Mayar Sherif: "Me gritaba todos los puntos, fue intenso, creo que fue el mejor partido que jugué en toda mi carrera. El torneo me subió el nivel y me hizo saber que estoy ahí, cerca".

No fue nada fácil llegar para ella hasta acá. Durante 2022, ya instalada entre las integrantes del equipo de la Billie Jean King Cup, la argentina se quedó sin coach y sin sponsor, por eso tuvo que armar una rifa para poder viajar a Europa y seguir compitiendo.

“El problema económico, la falta de infraestructura y la lejanía que padecemos los sudamericanos también nos ayuda a potenciar otros sentidos como la capacidad de lucha, el tratar de hacer todo lo posible para ganar porque no podés volver enseguida a tu casa”, afirmó la pergaminense en La Nación.

Actualmente entrenada por Juan Martín Aranguren, Riera también destacó el apoyo de Daniel Orsanic en sus inicios, quien era director de Desarrollo de la Asociación Argentina de Tenis en ese entonces: “A los 13 o 14 años dejé el tenis por un tiempo, durante casi un año. Dani me dio la idea de venir a Buenos Aires al Cenard para entrenarme algunos días y así volví. Fue como volver querer jugar".