Fútbol Internacional
La increíble historia de Pione Sisto, el refugiado que se hizo verdugo del Manchester United
El delantero del Midjtylland le convirtió el gol del empate a Chiquito Romero, por la Europa League. Nació en Sudán del Sur, se crió en Dinamarca y se enorgullece de sus raíces... tanto que hizo un ritual indígena el día que lo convocaron a la selección.
Ritual de los padres de Sisto
El ritual, si bien pudo haberlo avergonzado, le sirvió. En la Euro Sub 21 que se disputó en República Checa, entró en el primer partido contra República Checa, en lugar de Viktor Fischer –estrella del Ajax que no brilló– y a los pocos minutos convirtió el gol del triunfo. “Me siento danés, hablo en danés, pero me costó mucho que me reconozcan como tal. El fútbol me dio felicidad en momentos en los que la situación era muy difícil”, dice Sisto, 1,71 de pura fibra, puntos de contacto con Christian Eriksen y un futuro brillante por delante.
Contra el Manchester United, por la Europa League, le convirtió el gol del empate a Sergio Romero (su equipo terminó ganando 2-1): capturó una pelota que quedó picando y le dio fuerte al palo del arquero, que no llegó. Tuvo suerte, por un rebote en un defensor. Pero hablar de suerte por un rebote, en la historia de un refugiado que sobrevivió al viaje y a la guerra, es algo impropio.
Mientras tanto, el hombre que estará en los Juegos Olímpicos (en parte gracias a aquel gol contra los checos) sigue creciendo en el Midjtylland. Son épocas de refugiados. En Dinamarca, que fortaleció sus fronteras para impedir la llegada del flujo de inmigrantes, se acaba de aprobar una ley que permite quitarle pertenencias a los que ingresen con ellas. Se publicaron avisos en diarios turcos y sirios que pregonan que Dinamarca NO es la tierra prometida. Pero la historia de Sisto no deja de ser inspiradora para muchos que ya sueñan con imitarlo. Aunque para ser aceptados, quizás tengan que convertirse en estrellas de fútbol
Martín Mazur
@martinmazur
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