Cousins se marcha a New Orleans

Anoche, en el All Star Game de la NBA, DeMarcus Cousins jugó solo 2 minutos. Se creía que era por alguna molestia física, pero minutos después del partido se conoció la verdad: se estaba confirmando su traspaso hacia New Orleans. El pivote deja Sacramento Kings junto a Omri Casspi y jugarán en los Pelicans, a cambio de Tyreke Evans, Buddy Hield, Langston Galloway y dos selecciones para el draft 2017: una de primera ronda (protegida top 3) y una de segunda.

De esta forma, New Orleans tendrá a la mejor dupla interior de la liga, con Cousins y Anthony Davis. La duda pasa por cómo se complementarán y si podrán potenciarse mutuamente. Boogie es un interno lleno de recursos ofensivos. En esta temporada, venía promediando 27,8 puntos, 10,6 rebotes, 4,8 asistencias y 1,3 tapones por partido.

Los Pelicans están peleando por el octavo puesto en la conferencia Oeste y esta incorporación los pone como candidatos a lograr su objetivo y meterse en los playoffs. Sin embargo, es un canje arriesgado. Pese a todo su talento, el principal defecto de Cousins es su carácter. Irascible, irreverente y agresivo, por momentos se hace ingobernable. En sus seis temporadas en la liga, protagonizó muchos actos de indisciplina. Además, su contrato vence al final de la próxima temporada.

Los Kings, por su parte, dejan ir a su jugador franquicia, se “resignan” en esta serie regular y apuestan a una reconstrucción. Buscarán que Evans (dejó el equipo en 2013) recupere su mejor nivel y confían en el joven Hield. Esperan conseguir un valor importante en el próximo draft y quedan con un espacio salarial importante, para tentar a una estrella en el próximo mercado.