Nuevo doping positivo para Luis Ortiz

El próximo 4 de noviembre, en el Barclays Center de Brooklyn, el estadounidense Deontay Wilder (38-0, con 37 KOs) iba a defender su título mundial de peso pesado del CMB ante el cubano Luis Ortiz (27-0, con 23 KOs), en lo que era una pelea muy atractiva, entre dos grandes noqueadores, invictos, y que estarían ante la oposición más fuerte de sus carreras.

Sin embargo, el combate podría cancelarse. Anoche, se conoció que Ortiz dio positivo en un control antidoping por una sustancia prohibida (un diurético que se utiliza para tratar la alta presión sanguínea pero también puede mejorar el rendimiento). Todavía hay que esperar la contraprueba, pero casi nunca el resultado difiere al de la prueba A.

Este será el segundo caso de doping para el cubano. En 2014 venció por KO1 a Lateef Kayode en Las Vegas, pero luego se conocieron los resultados de un análisis de orina previo a la pelea y dio positivo por esteroides. El resultado de la pelea fue cambiado a “No contest” y recibió una suspensión de ocho meses. Tras ese antecedente, ganó sus 6 siguientes peleas, sin problemas en los controles.

Wilder, por su parte, sigue con su mala suerte: es la tercera vez en los últimos 18 meses que se le cae un rival por dar positivo en un control antidoping. En mayo del 2016 iba a viajar a Moscú para enfrentar al duro local Alexander Povetkin, pero 9 días antes de la velada dio positivo por meldonium. Más adelante, el estadounidense terminó ganando un juicio por 5 millones de dólares.

En febrero de este año, iba a hacer una defensa de su título ante el polaco Andrzej Wawrzyk, pero este también dio positivo por una sustancia prohibida y fue reemplazado por Gerald Washington. Pensando en la velada del 4/11, lo más probable es que el reemplazante de Ortíz sea el haitiano Bermane Stiverne, el rival mandatario del CMB, quien iba a pelear en el semifondo ante Dominic Breazeale pero podría tener su revancha ante Wilder, contra quien perdió en 2015.