1981. El trágico destino de Pena
Dolor por la repentina muerte de Hugo Osvaldo Pena, quien jugó en Argentinos, River, San Lorenzo y Chacarita. En esta nota aparece la última foto del jugador que perdió la vida a los 29 años.
![](http://2022.elgrafico.creatos.com/media/cache/pub_news_details_large/media/i/ad/00/ad009a67449eb3e95ffa16720fd253fc4a50a862.jpg)
La última foto, la última pregunta, la última respuesta. La cruel realidad ha desalojado definitivamente lo que imaginamos, quisimos, deseamos: que fuera una pesadilla.
El jueves pasado fuimos con Norberto Mosteirín a completar la nota que habíamos iniciado 48 horas antes, allá, en la Ciudad Deportiva de San Lorenzo. A eso de las once llegó el Tomate Pena. Venía arrastrando su pierna derecha. Una rama lo ayudaba a caminar. Mosteirin le apuntó con su cámara y el rostro de Pena se iluminó con una sonrisa.
—Pará, no me saqués así..., para que escondo la rama, si no voy a parecer un inválido.
—¿Cómo andás?
—Bien, hace dos días me sacaron el yeso. Me operaron el ligamento del tobillo derecho. Ahora estoy haciendo recuperación. Vine a saludar a los muchachos porque mañana se van a Villa Gesell. Yo me voy a reunir con ellos la semana que viene.
![Imagen Hugo Osvaldo Pena.](http://2022.elgrafico.creatos.com/media/cache/pub_news_details_large/media/i/3b/6b/3b6bece11260e567ef4cb47f70a096005c0c3f58.jpg)
El sol estaba en lo alto. Sólo el destino sabía por dónde transitaba la sombra tenebrosa. Sólo el destino sabía que Hugo Osvaldo Pena había ido a despedirse de sus compañeros, pero para siempre.
29 años. Casado con Susana Mirta Herrera. Tres hijos pequeños: Sebastián. Gabriela, Laureano. Una carrera como futbolista que se inició en las inferiores de Argentinos Juniors. En 1973 lo compró River. Después Chacarita. Y por fin San Lorenzo.
El viernes 9 al mediodía estaba en su casa de la calle Cervantes, en Villa Devoto, sentado en el living. El pie derecho sumergido en un baño de agua y sal. Se incorporó para encender el televisor. Su mano derecha se posó sobre el instrumental exterior del aparato. Y en ese instante recibió una descarga fatal. Vanos fueron los intentos para reanimarlo. Fue trasladado con urgencia al Hospital Vélez Sarsfield. Pero llegó sin vida.
Fue un buen jugador. Y fundamentalmente, un gran muchacho. El viernes a la tarde la noticia conmovió redacción de EL GRAFICO.
Por un rato nos aferramos a la pesadilla: Pero era la cruel realidad.
![Imagen Herido en su pierna, ayudan a Hugo Pena.](http://2022.elgrafico.creatos.com/media/cache/pub_news_details_large/media/i/5f/d5/5fd56402de32c1d643219433f6aa934de6f4b257.jpg)
El Gráfico (1981).