Como si no hubiera cámaras: las inéditas vivencias de los campeones del Mundo y el show de Dibu

EMILIANO MARTÍNEZ predomina más que ningún otro en el programa especial por los dos años de la Copa del Mundo en Qatar y que reunió también a Enzo Fernández, Gonzalo Montiel, Lautaro Martínez y Alexis Mac Allister para rememorar aquella gesta futbolera. La frescura del arquero se evidencia a cada momento en "Un instante para siempre", difundido en el canal de Youtube Afa Estudio.

Sentados alrededor de una mesa y como si no hubiera nadie grabándolos, los campeones sacaron a relucir los recuerdos a partir de fotografías que actuaron como disparadores y lo hicieron de una forma nunca antes vista. Por ejemplo, la del primer gol de Arabia Saudita en el debut. "El primer tiro del Mundial me agarró frío, podría haber hecho más. Pero este no me afectó tanto, era el 1 a 1. El otro fue un baldazo de agua fría", reconoció Dibu.

Sobre el gol de Alexis a Polonia en el 2-0 de la tercera fecha, confesó que "cuando vi el gol dije: amigo, esto lo dijo Scaloni en el entretiempo: Centro atrás. 'Moli, levantá la cabeza y tirá el centro atrás que va a ser gol seguro', había dicho". Y al jugador de Liverpool le hizo una chanza: "¿querés decir que jugaste vos y empezamos a ganar?". "Jamás diría algo así", le contestó sonriente Mac Allister.

 

 

A la hora de recordar el partido de cuartos de final con Países Bajos y la definición por penales, el arquero de Aston Villa relató: "Lo vi a Van Dijk patear en la final contra Chelsea y dije: 'en el Mundial tiene que ir fuerte ahí'. Después de ese penal estuve un año con dolor de cintura, me hizo: ¡Pak! De los penales que atajé en el Mundial, ese era clave. Aparte atajé mal en el partido. Me patearon dos veces y me hicieron dos goles".

Sobre la imagen de Lautaro mostrándole la pelota al arquero Andries Noppert, el Toro reconoció que "no le entendía nada. Iba a patear abierto y después me frené, lo quise mover un poquito. Me anulaban goles hasta en los entrenamientos". Dibu lo chicaneó: "Pensé que lo ibas a festejar para la derecha, me dejaste solo solo. Caí palmado".

El 23 continuó con sus vivencias del duelo contra los naranjas: "Boqueaban mucho, se me cruzaron los cables; le quería pegar a alguien. No sentía que viniera atajando bien y esto me dio vida. Cuando nos empataron no estaba tan nervioso como con México".

Y Alexis remató al reconocer que "después de Holanda fue cuando dijimos: 'tenemos chance de ganarla'", además de afirmar que "para mí la final fue el mejor partido que jugué en la Selección".

Rápidamente se sumergió Dibu en ese partido con Francia: "Los estábamos matando, fue el partido que más disfruté hasta los 70'. Los de arriba estaban muy bien, Angelito al lateral derecho lo mató", y Mac Allister le respondio con la sensación en la colosal atajada del cierre contra Kolo Muani: "Estaba en el banco y no reaccionó nadie, estábamos todos en shock".

"He atajado muchas mejores pelotas que esa en el sentido técnico. En esta dije: 'por favor, reventame la cara'. Cuando tiró el pelotazo Konaté dije: se lo come a Ota, no llega. Y el desconfiar de la defensa me dejó estar listo. Si yo confiaba en que Otamendi la sacaba, perdía", amplió sobre la descomunal tapada.

"¿No pensabas que te la podía tirar por arriba?", preguntó el Toro. "No porque él la estaba esperando y vi que iba a cargar la pierna. Dije: 'ya fue', me puse medio en diagonal y me abrí. Si la pelota está abajo tengo la pierna en el piso, pero como estaba picando pensé: 'voy más arriba'. Para resumirlo: ¡un orto!", se sinceró ante la carcajada general.

Gonzalo Montiel tuvo a su cargo el penal que desembocó en el desahogo y el festejo, y el Dibu no le tuvo piedad: "Pateás horrible los penales, pero todos los arqueros se tiran para el otro lado... ¿cómo hacés?". "No look", bromeó Enzo Fernández. "Aparte van todas despacito", contestó con una sonrisa el propio ejecutor, y contó sus sentimientos: "Estaba llorando por el penal que hice, me imaginé una banda de cosas".

"Capaz que si no tenías esta revancha te acordabas de lo otro toda tu vida. Ahora todos se acuerdan de esto", se puso serio por un momento el arquero, pero volvió enseguida a las andadas: "No viniste a festejar conmigo, te agradezco pero fuiste un mala leche, te fuiste para el otro lado...". "No sabía qué hacer", reconoció Montiel. "¡Se sacó la camiseta, nada que ver!", recordo en tono bromista Enzo. y Lautaro le hizo un reclamo: "Yo llegué primero al festejo, ¿eh?". "Es verdad, amigo", cerró Cachete.

La cuestión del festejo se extendió un poco más:

- Lautaro: Yo no sabía qué hacer. Salí corriendo a donde estaba Cache. Unos salieron para donde estaba Leo, otros para donde estaba Dibu... Reaccioné como en la tanda de penales que buscás al último que patea.
- Alexis: Se me pone la piel de gallina, no lo podía creer.
- Enzo: Uno dice: "somos campeones del mundo", increíble.
- Montiel: El grupo disfrutó el torneo entero, se notaba en los entrenamientos.
- Dibu: Entré a la cancha en la final y dije: 'jugué en lugares tan feos en mi vida que hoy voy a disfrutar pase lo que pase'. Por eso no me afectó el primer gol ni el segundo. Cuando terminé, pensé: 'hoy soy mejor arquero. Si pude mantener la presión después de ese 3 a 3, no hay partido que sea peor que este; podés jugar final de Champions o lo que sea, pero como esto, nada. Encima el día anterior me patearon todos practicando penales y no agarré ninguno...
- Alexis: Nadie se escondía, todos querían patear.
- Dibu: Es que todos hicieron algo, nadie ganó solo.
- Enzo: Todo gracias el equipo.

Sus hazañas desde los doce pasos le valieron al Dibu el trofeo al mejor arquero del Mundial, y eso trajo un momento muy divertido:

- Alexis: Ese es el que te pusiste en la japi, ¿no?
- Dibu: Ahí bardeé, ¿no? No había necesidad.
- Lautaro Martínez: Es lo que te salió...
- Montiel: ¡La adrenalina, amigo!
- Dibu: ¿Sabés las veces que tuve que explicar que yo no soy así? La gente pensaba que era un descerebrado.
- Lautaro: Yo llegúe al club después y me decían: '¿el arquero no está bien, no?', ¡ja!
- Dibu: Es mi manera de demostrar que estoy tranquilo, qué se yo... me siento como cuando estaba en Mar del Plata. Siempre me sale alguna chispa, pero fue una celebración noble, de bueno, como diciendo: 'lo logré después de tantos años'.