Joshua-Klitschko, una megapelea en Wembley

Por el increíble marco que se espera y por la gran cantidad de condimentos deportivos, Anthony Joshua y Wladimir Klitschko serán los actores principales de una de las peleas más grandes de los últimos tiempos. En el mítico estadio de Wembley, 90.000 personas asistirán al megaevento que, en Argentina, será transmitido por TyC Sports, a partir de las 17.

Joshua (18-0, con 18 Kos) es un inglés de 27 años que estará exponiendo sus títulos de la AMB y la FIB de peso pesado ante el ucraniano Klitshko (64-4, con 53 KOs), de 41 años. Ambos fueron campeones olímpicos (el primero en Londres 2012 y el segundo en Atlanta 1996). Quizá esa sea la única coincidencia, ya que en el resto de los aspectos, es un duelo de opuestos.

Joshua es una de las nuevas sensaciones del peso completo. Tiene un récord perfecto, noqueó a todo rival que le pusieron enfrente pero no tuvo oposición respetable. Probablemente, su mejor triunfo haya sido ante Dominic Breazeale. Nunca pasó los 7 rounds pero físicamente está impecable y no tendría problemas en aguantar los 12 asaltos. Tiene una pegada respetable y se destaca por su energía, buena movilidad y velocidad de piernas. A los 27 años, tiene la gran oportunidad de vencer a una leyenda viviente del deporte y transformarse en una de las máximas figuras del pugilismo en la actualidad.

Klitschko, por su parte, es un veterano de mil batallas, con mucha experiencia y 27 peleas por títulos mundiales. Junto a su hermano Vitali, reinó en la categoría durante una época donde no aparecieron grandes adversarios, pero igualmente deja un legado muy valioso. Sus victorias más resonantes fueron ante Chris Byrd, David Haye, Alexander Povetkin y Kubrat Pulev. No tiene un estilo tan atractivo, pero su defensa es muy buena, tiene mucho oficio y un poder destructivo en sus puños. Desde lo físico se mantiene muy bien, pese a su edad, pero en sus últimos dos peleas se notó un declive importante en su nivel. Estuvo más lento y parecía un poco retraído a la hora de soltar las manos. Ganó sin lucir ante Bryant Jennings y perdió todos sus títulos ante el excéntrico inglés Tyson Fury.

El ucraniano es una gran estrella y podría seguir haciendo peleas cómodas en cualquier lugar de Europa, cobrando muy buen dinero, pero eligió tomar el riesgo de enfrentar a un joven hambriento y en ascenso, en la búsqueda de conseguir un triunfo para demostrar que sigue estando vigente y todavía es el mejor en su categoría. Las 90.000 almas que acudan a Wembley disfrutarán de una pelea que, quizá no sea del todo entretenida, pero mantendrá una tensión constante, con la promesa de que en cualquier momento puede haber un cruce que los eyecte de sus asientos.