Esperanzas en Boca por un buen indicio

BOCA se prepara con todo para los duelos con Independiente del Valle por los 16vos de la Copa Sudamericana, cuyo encuentro de ida será el próximo miércoles en Guayaquil. 

Ante la gran cantidad de bajas por convocatorias a la Selección Argentina que disputará los Juegos Olímpicos (Equi Fernández, Cristian Medina, Kevin Zenón), suspensiones (Pol Fernández) y lesiones (se desgarró Cristian Lema), el panorama no es nada alentador para el entrenador Diego Martínez, a pesar de las llegadas de Gary Medel, Tomás Belmonte, Brian Aguirre y Milton Giménez.

Ocurre que todos los ausentes son titulares, a los que hay que sumar Leandro Brey, arquero suplente que también viajó a París y otra pieza clave como Luis Advíncula, que llegó de la Copa América con Perú con una inflamación en el tendón de Aquiles que lo perjudicó en la disputa del torneo continental.

Sin embargo y cuando se pensaba que no llegaría a jugar con los ecuatorianos, la historia podría cambiar incluso por el gran deseo del futbolista de estar presente. En tal sentido hubo un gesto que generó optimismo: cuando sus compañeros descansaban este viernes por el día libre establecido por el DT, el peruano igualmente se entrenó.

El lateral estuvo en la cancha auxiliar del Boca Predio de Ezeiza con la supervisión del doctor Jorge Batista, médico del plantel, pero fueron los primeros trabajos en campo ya que venía realizando gimnasio y kinesiología desde que se lesionó el pasado 21 de junio ante Chile.

El propio facultativo se mostró optimista al difundir en redes sociales imágenes de Advíncula trotando y una palabra esperanzadora: "¡Mejor!".

Por el momento su sector fue cubierto en los ensayos por Lautaro Di Lollo y Dylan Gorosito, aunque una opción podría ser también Nicolás Figal.