Deporte motor

El fuerte gesto que marcaría el desembarco de Franco Colapinto en Red Bull

Un particular hecho ocurrido este viernes en Interlagos puede tomarse como señal para ratificar el pase del argentino a la escudería que actualmente es campeona mundial de constructores.

Por Redacción EG ·

01 de noviembre de 2024

FRANCO COLAPINTO siempre sube la apuesta. En apenas tres meses pasó de debutar de manera imprevista en la Fórmula 1 abordo de un Williams a completar un puñado de carreras en las que logró 5 puntos y demostró aptitudes para comenzar a estar en boca de todos.

Este viernes el periodista Rubén Daray aseguró que ya está sellado el pase del argentino a Red Bull, la actual marca campeona mundial de la copa de constructores y donde milita el triple monarca Max Verstappen. De este modo, ocuparía en 2025 la plaza que dejaría vacante Sergio Checo Pérez.

Hubo un fuerte gesto en la mañana del viernes que podría decir mucho acerca del pase del argentino a dicho equipo: la visita de Christian Horner, cabeza de Red Bull, al búnker de Williams, del que se retiró con una sonrisa dibujada en el rostro pero sin hacer declaraciones.

 

Christian Horner, jefe de Red Bull, al salir del búner de Williams.
 

El propio Horner había expresado que "sería un muy mal jefe de equipo si no preguntara si está disponible", luego de que trascendiera el rumor de una oferta de 20 millones de dólares de su escudería a la casa británica que hoy cobija a Colapinto para hacerse de los servicios del representante Albiceleste.

 

En consonancia a ese interés, este jueves el tricampeón del Mundo, Max Verstappen, piloto estrella de Red Bull, tuvo muy buenos conceptos hacia el que sería su compañero en 2025: "Está haciendo un gran trabajo y Williams se debe estar rascando la cabeza un poco sobre qué hacer con Franco. Pero para mí solo demuestra que los equipos en general parecen más abiertos a poner jóvenes talentos. Y en confiar en ellos". 

Lo cierto es que lo que comenzó apenas como un sueño adquirió enormes visos de realidad en la atmósfera paulista de la Fórmula 1 en la que Franco intentará dar otro paso hacia adelante en su incipiente trayectoria en la máxima categoría del automovilismo.