El tenso momento que vivió Zverev en Australia por sus acusaciones de violencia de género
El alemán, quien perdió con Jannik Sinner en la final, fue protagonista de una situación que llamó la atención de todos.
Por Redacción EG ·
26 de enero de 2025
ALEXANDER ZVEREV cayó en la final del Abierto de Australia ante Jannik Sinner, quien lo derrotó por 6-3 7-6 (4) y 6-3, y le impidió levantar el primer título de Grand Slam de su carrera. Sin embargo, hubo un momento inesperado que nadie preveía y sorprendió a todos, incluso al propio jugador.
El alemán, de 27 años, estaba por empezar a dar su discurso durante la ceremonia de premiación en Melbourne cuando una mujer del público le recordó las acusaciones de género que tuvo en su contra en los últimos años.
“¡Australia cree en Olya y Brenda!”, se escuchó claramente desde las tribunas más de una vez justo cuando el resto de los presentes en el estadio Rod Laver Arena estaban en silencio. Ante esto, Zverev se incomodó, miró hacia ese sector y se quedó callado.
Los nombres que se gritaron son de las dos ex parejas que lo acusaron por violencia física, psicológica y verbal al actual número 2 del mundo, quien será el principal favorito del ATP de Buenos Aires que empezará el 10 de febrero.
La primera fue su ex novia Olya Sharypova, quien dijo que sufrió golpes, amenazas y hasta un intento de asesinato por parte de Zverev: "La primera vez que me pegó fue en Mónaco. Habíamos discutido, me tomó de la cabeza y me golpeó contra la pared".
A partir de esta denuncia, la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), que no tiene ningún protocolo ni formas de accionar ante estas situaciones tal como sí sucede en el fútbol, por ejemplo, primero se mantuvo en silencio por meses y después empezó una "investigación independiente", que cerró en 2023.
Tiempo después, fue Brenda Patea, la madre de su hija, quien contó que Zverev la agarró del cuello asfixiándola. El alemán había sido multado, apeló y en 2024, llegó a un acuerdo que incluyó una condición monetaria de 200.000 euros aproximadamente.
En ambos casos la postura del campeón olímpico fue siempre la misma: negar los hechos o no hablar del tema. Mientras era enjuiciado, siguió jugando como si nada pasara.
“Ya no hay más acusaciones. Hace nueve meses que no las hay. Bien por ella (la mujer que gritó). No voy a volver a tocar ese tema”, concluyó Zverev en la rueda de prensa posterior a la final.
Foto de Portada: AFP
