Se dice en el fútbol, como si se tratara de una verdad absoluta, que los torneos largos favorecen a los que mejor y más rico plantel tienen.

Se repetía hasta el hartazgo que la eliminación en la Copa Libertadores les iba a allanar el camino a Boca y River en la Liga Profesional, pero nada de eso sucedió.

Al cabo de 11 fechas, Boca y River cosechan 15 puntos y su andar va de mal en peor. Ambos se ubican a 10 puntos de Atlético Tucumán, el único y sorprendente líder, y no dan indicios de meterse en la pelea por el título. Ya hubo tres jornadas en la que los dos perdieron sus respectivos partidos. 

Para encontrar una coincidencia con este presente, con River y Boca con una cosecha tan magra de puntos, hay que remontarse hasta el Clausura 2010. 

En aquel entonces, River, con Leonardo Astrada como DT, sumó 12 puntos (3 triunfos, 3 empates y 5 derrotas) y se ubicaba 16°. Boca, dirigido por Abel Alves, también un entrenador interino como Hugo Ibarra, estaba en el puesto 18 con 11 puntos, producto de 2 triunfos, 5 empates y 4 derrotas.

Independiente era el puntero para ese momento del torneo que finalmente terminó conquistando Argentinos de la mano de Claudio Borghi. 

DISEÑO DE PORTADA: MATÍAS DI JULIO