De pie. Bernabé y Peucelle, pólvora y arte.
La Máquina hizo escuela. El Charro y Angelito, dos personajes ilustres.
Semillas de bondad. Menéndez y Sívori la rompieron a fines de los 50 y dieron vueltas.
Los Onega. Daniel, goleador, y Ermindo, genial. Prosapia riverplatense.
Dupla de oro. Alonso y Francescoli aportaron títulos y fútbol excelso.
Ortega y Crespo se coparon en el 96.
El matador y el Muñeco dejaron su huella.
Saviola y Aimar, materia prima de primera calidad. Artífices del Apertura 99. Inolvidables.
El Gráfico (2003).
Fotos: Archivo El Gráfico.