STEFANOS TSITSIPAS se sintió un privilegiado: compartió el equipo de Europa con Roger Federer el día de su despedida del tenis en la Laver Cup de Londres.. Tras el último partido de la carrera del suizo, en dobles junto con Rafael Nadal, el griego se acercó para pedirle un trozo de toda su gloria.

"Significaría mucho para mí poder tener una de tus raquetas. Te seguí desde que tenía tres años. Si pudiese tener una raqueta para enmarcarla en mi casa sería algo muy especial. Espero que no te importe darme ese pedazo de tu leyenda", le dijo Tsitsipas, según reflejó el sitio de la ATP.

Entonces Federer le entregó, feliz, una de las Wilson Pro Staff RF97 que tenía en su raquetero. "Obviamente aceptó. Roger era mi ídolo de la infancia. Hubiera estado mal no conseguir nada de su último partido. Fue muy amable y duermo con ella de vez en cuando", expresó el griego.

Para Tsitsipas las emociones de la Laver Cup fueron más allá del último partido de Federer: "Lloré esa noche. Lo más sorprendente fue lo emocionado que me sentí a a mañana siguiente. Uno podría pensar que lo dejaría pasar. Pero tenía lágrimas en la cara mientras desayunaba".

"Ves todos los buenos momentos que pasan. Creo que eso es lo que se te viene a la mente cuando recordás la maravillosa despedida de Federer. Creo que no podría haberlo hecho mejor con sus compañeros. Espero que mi retiro sea así", sentenció.