DIEGO SCHWARTZMAN ya conoce el inicio de su camino en el torneo de Lyon, la última parada de su calendario con vistas a Roland Garros, uno de los grandes objetivos del año. Este miércoles hará su presentación como tercer favorito en los octavos de final ante el francés Richard Gasquet (52° del mundo, ex 7°), quien viene de eliminar 5-7, 6-4 y 6-3 a su compatriota Gregoire Barrere (123°), surgido de la qualy.

El número diez del mundo, de 28 años, sólo pudo vencer una vez a Gasquet: fue el año pasado, en el Masters 1000 de París Bercy. En las anteriores presentaciones fue derrota para el Peque en Amberes 2016, Montecarlo 2018 y Cincinnati 2019. En caso de avanzar de ronda lo esperará en cuartos de final el ganador del duelo entre el ruso Karen Khachanov (26°) y el polaco Kamil Majchrzak (129°).

De los cuatro torneos de la gira de canchas lentas Schwartzman apenas logró dos triunfos, ambos en Barcelona, y sumó tres caídas en los tres Masters 1000 que animan esta etapa del año: Montecarlo, Madrid y Roma. En medio de la etapa más fructífera del año para su juego cedió un puesto en el ranking a manos del italiano Matteo Berrettini, quien lo desplazó el 9° lugar tras alcanzar la final de Madrid.

La última tuvo lugar en el Foro Itálico, sin atenuantes ante el canadiense Felix Auger Aliassime, y disparó una fuerte autocrítica por parte del Peque: "No puedo encontrar la solución en el momento de competir,; más allá de que en Barcelona estuve un poco mejor no es una gira buena. Trato de encontrar cuál es la razón y no sería fiel a mi comportamiento buscar una excusa física. Me pasó en muchos momentos de mi carrera: la única solución es seguir trabajando".