Cómo le fue al nueve que quieren varios y su fuerte frase

MILTON GIMÉNEZ es el nueve de moda en el incipiente mercado de pases del fútbol argentino. Tras su doblete contra Newell's en la fecha pasada de la Liga Profesional, el jugador de Banfield saltó a la palestra y comenzó a ser relacionado con varios clubes que lo pretenderían.

Se habla por estas horas de un firme interés de San Lorenzo para reemplazar la casi segura salida de Adam Bareiro y también de la idea de Racing de avanzar por el futbolista ante la chance cierta de que Roger Martínez deje la entidad de Avellaneda. Por su parte, 
Vélez también lo tendría en carpeta para reforzar un puesto en el que Gustavo Quinteros quiere sí o sí otro elemento.

Los hechos marcan que después de todo lo que se habló del goleador en la semana, tuvo acción este miércoles en el Libertadores de América, en la victoria de Independiente frente al Taladro por 2-1. Precisamente, el tanto del cuadro de Julio Falcioni lo convirtió Giménez de cabeza, al aprovechar un rebote que dio Rodrio Rey tras otro testazo de Emanuel Insúa.

Se mostró muy presente en el área, convertido en una pesadilla para los defensores por su estilo de ir a todas, con mucho roce, además de demostrar toques de calidad. Tuvo otro cabezazo que derivó en un penal por mano de Joaquín Lazo que él mismo ejecutó pero que Rey atajó de manera magistral.

Los penales le juegan últimamente una mala pasada al ex Central Córdoba porque había fallado también uno contra la Lepra, además de convertir en ese partido otro que le venció las manos al arquero Lucas Hoyos, que lo había contenido.

El atacante de 27 años lleva 4 tantos en las 5 fechas del torneo local y metió 9 en 31 compromisos con Banfield, que no pagó los 2 millones de dólares por su pase a su anterior club, Necaxa. Entonces, ante el reclamo de los mexicanos, la FIFA determinó que la entidad del Sur tiene que abonar un extra de 255.000 dólares por intereses y multa. 

Por su parte, la versión de los dirigentes verdiblancos es que no pudieron girar el dinero por las restricciones cambiarias que rigen en la Argentina.

Después del encuentro con el Rojo, Giménez tomó la palabra y fue breve pero elocuente cuando lo consultaron sobre su futuro: "No sé qué va a pasar pero fue el último partido con la camiseta de Banfield. Es un tema dirigencial, pero si no lo resuelven, no jugaré", manifestó.

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