Roger Martínez brindó detalles sobre sus charlas con Riquelme antes de volver a Racing
El delantero colombiano repasó aquellos contactos con el presidente de Boca y explicó los motivos por los que decidió regresar a la Academia.
ROGER MARTÍNEZ vivió una tarde de gloria el pasado sábado en Asunción cuando definió la Copa Sudamericana con una corrida y una brillante definición ante Cruzeiro.
"Este campeonato es lo mejor que me ha pasado como futbolista. Ganarlo con Racing tiene algo especial, y sinceramente estoy muy feliz", agregó en esa misma línea el delantero de 30 años.
Sus charlas con Riquelme y la posibilidad de Boca
Roger es un viejo anhelo de Juan Román Riquelme, quien en más de una ocasión tentó al ex atacante de América de México.Así lo reveló el propio futbolista: "Boca siempre estuvo ahí. Hablé con Román, le agradecí mucho que se fijara en mí. Me sentía muy feliz que alguien como él se fijara en mí, eso me halaga mucho".
"Pero desde el primer momento que tuve contacto con Racing no dudé en volver porque era lo que más quería. Estoy disfrutando de este momento, vivo el día a día. Quedan partidos por jugar. Ya veremos después qué pasará", señaló de cara al futuro.
La alegría por el título con Racing
Siguiendo con las sensaciones tras levantar la Sudamericana con la Academia, el cafetero indicó que "a veces uno como jugador no cae en lo que es la dimensión de lo que se vive. Yo miraba la cancha en el momento que metí el gol, veía la gente llorando, abrazándose... es algo impresionante".
Y apuntó: "Darle una alegría tan grande al club que me dio la posibilidad de ser profesional es una de las cosas más bonitas que me han pasado".
"Cuando fui a la selección estaba en mi mejor momento desde que volví a Racing. Cuando me lesioné no me frustró, pero dije '¿cómo me va a pasar esto ahora?'. Pensaba mucho en la Sudamericana. Dije: 'Aquí tengo que hacer algo, tenga una lesión grave o no'", confesó sobre cómo fueron los días previos a la final.
Y concluyó: "Justo en ese momento me llama Gustavo Costas para preguntarme cómo estaba, y le dije que quería estar. Nunca me había infiltrado. A la primera semana con bota, al octavo o noveno día me la saqué y traté de empezar a darle movilidad al tobillo. Fueron momento muy difíciles, yo quería estar pero bien. Con Corinthians me dolía bastante".