Matías Rojas, de un sueño a otro: fue compañero de Messi y ahora llegó a River

MATÍAS ROJAS es otro de los numerosos refuerzos que abrochó River para conformar el equipo que pretendeMarcelo Gallardo. El paraguayo llega libre de Inter Miami y confesó que recibió de Núñez "un llamado para ver cómo era mi situación y mi respuesta fue sí de inmediato".

En tal sentido, subrayó en diálogo con ESPN que "llegar a River es impresionante, una oportunidad única que me dio la vida. Siento que es el equipo más grande de Sudamérica. Incluso antes de hablar con mi familia respondí afirmativamente, la intuición me hizo pensar que era el lugar indicado".

Admitió también que desde el primer contacto "me vizualicé triunfando porque llegué en el mejor momento de mi carrera. No soy un jugador individual, dependo del grupo. Cuando funciona el grupo, yo funciono mejor. Me conozco y sé que dependo cien por ciento de eso. Gallardo es el número uno para eso, conoce muy bien la institución y sabe cómo triunfar acá. Es solamente acomodarme y seguir el camino que él va marcando, así va a ser todo más fácil".

"Quiero ponerme bien físicamente, competir en ese aspecto, estamos corriendo bastante y el cuerpo se tiene que adaptar a la exigencia de acá. Hablé con Marcelo y me dijo que ya íbamos a ver el tema posicional", añadió.

Sobre su experiencia en el club de la Florida y el hecho de haber sido compañero de Lionel Messi, reconoció que "tuve un gran aprendizaje, estoy súper agradecido a la vida por ese momento que me tocó vivir con el que para mí es el mejor de la historia".

Y amplió: "Uno siempre va generando cierto prejuicio bueno o malo. De repente me encontré con la chance de estar en el mismo vestuario con él y antes de llegar tuve diez días previos de despertarme a la noche y pensar cómo iba a reaccionar. Pero cuando estuve con él, vi que se comporta como uno más del equipo y eso lo hace más grande aún, me sentí súper cómodo desde el primer momento".

También valoró la experiencia con otras glorias del fútbol, ya que "viví cosas más allá de los partidos no sólo con Leo, sino con Busquets, que para mí, de lo que vi en el fútbol es el mejor cinco de la historia, revolucionó el futbol. Hice buena amistad con él y con Jordi Alba, que está entre los mejores laterales izquierdos de la historia. Y Luis Suárez, ni hablar. Uno agradece a la vida por tener esa oportunidad de nutrirse día a día viendo lo que hacen: cómo comen, cómo piensan, cómo compiten, cómo consiguieron tantas cosas y siguen queriendo ganar".

Al final entró en el juego de comparar su gran pegada con la de Messi. "¿Cómo le voy a enseñar de mi pegada? ¡Es una locura! Aprendí muchísimo. Él a veces habla poco pero enseña mucho con lo que hace. A mi forma de ver esa es la mejor forma, para mí es el número uno", concluyó.