LA POLÉMICA que sobrevuela alrededor del acuerdo entre Estudiantes y el magnate estadounidense Foster Gillett no para de crecer.

Ante los rumores de una eventual caída del vínculo, tras la falta de fecha de la Asamblea Extraordinaria para aprobar la sociedad o la demora en la habilitación de Ezequiel Piovi por falta de pago, el presidente Juan Sebastián Verón salió a hablar para desactivar especulaciones.

“Lo que está demorando la transferencia de los fondos es una cuestión administrativa, que incluye las restricciones conocidas que hay en el país y que hay que acomodar. Con Foster Gillett hablo día por medio, él está en Buenos Aires y está ocupado en resolver esta situación y en cumplir”, dijo la Bruja.

Y aclaró, en diálogo con CieloSports, sobre la demora por lo de Piovi, luego resuelta con fondos propios del club: “Acá hay algo importante que decir: las culpas son compartidas. El club le pidió un préstamo y ahora tiene que aguardar estas cuestiones burocráticas. Se dio así, no es que el dinero no se transfirió o no se quiso transferir. El club asumió un riesgo también en esperarlo y hay que hacerse cargo de eso”.

 

 

 

 

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“Tomamos la decisión de no vender y de reforzarnos para jugar la Copa Libertadores. Pero bueno, luego pasó esta cuestión administrativa que también se deberá solucionar a futuro para agilizar el movimiento si finalmente se da el acuerdo”, sostuvo el presidente pincha.

“Se estima que en esta semana todo estará solucionado”,agregó, para arrojar armonía en River y en Vélez, dado que la tardanza en el movimiento de los fondos también los afecta por la compra de Rodrigo Villagra y de Valentín Gómez, respectivamente.

Verón también se plantó con firmeza: aclaró que el magnate estadounidense no está desaparecido sino con energía para resolver las cuestiones que todavía están en el limbo. “El acuerdo con Foster no está en riesgo”, expresó.

La decisión

Verón sabe que se encuentra en plena cruzada por transformar, desde su punto de vista, a Estudiantes en otro tipo de institución. Pero también aclaró, incluso después de sostener que el acuerdo no está en riesgo, que podría irse si se cae el vínculo con Gillett.

"La interna dirigencial no se va a llevar puesto a Foster, porque es un proyecto mío. De última me llevará puesto a mi. El club lo caminé y lo pusimos bien, ya está. No tengo más ganas de seguir renegando. Yo pretendo y quiero algo más grande. Viví el proceso, pero queremos algo más y es ahí. Hay que meter los pies en el barro y arriesgarse", disparó en diálogo con Radio Provincia.